Encontrar un hueco laboral en España sigue siendo complicado. Pero, desde la perspectiva de una persona con parálisis cerebral podemos hallar muchas más piedras en este camino. Sin embargo, es posible insertarse gracias a distintos recursos como las Unidades de Orienta, de las cuales ASPACE dispone y, por las que Mariano Méndez ya ha pasado, descubriendo oportunidades laborales y sus primeros empleos:
Yo me inserté en el mundo laboral gracias a mi orientadora Esther, que fue la que me ayudó a entrar en este empleo en el que estoy ahora. Anteriormente no tenía experiencia salvo por un negocio familiar en el que ayudaba a mis padres. Mi primer trabajo realmente ha sido en el que actualmente estoy a mis 37 años sin contar el anterior que fue de 6 meses en la Diputación de Granada, que también conseguí gracias a la Unidad de Orienta.
Ahora trabajo de conserje y recepcionista en ASPACE Granada.
Tras cursar la E.S.O hice Bachillerato en cuatro años ya que no podía con tantas asignaturas. Después me interesé en las Unidades de Orienta sobre el año 2011, donde pude hacer cursos de administrativo, contabilidad, como también me enseñaron conocimientos básicos de ordenador.
Después de ese trabajo en la Diputación me seguí formando a través de Orienta en cursos más avanzados.
Desde que era pequeño yo he sido socio y usuario del centro. Conocí al personal de ASPACE y fue la propia presidenta la que me recomendó que existían cursos y oportunidades laborales tras yo manifestar también mis ganas de ser más independiente laboralmente. Tenía ganas de ser
Hace cosa de un mes y medio organizaron una charla en ASPACE Granada acerca de lo que ganaría una empresa si contrataran a alguien con discapacidad, y tras esa charla se pusieron en contacto conmigo para ofrecerme el trabajo de conserje.
Las Unidades de Orienta me han ayudado, en primer lugar, a aprender a socializar con las personas, a salir de mi círculo cercano. Además de a la movilidad, enfrentándome al transporte público solo y viendo cómo me manejaba con el metro. Me generaba una autonomía increíble.
Mi experiencia con las dos orientadoras que he tenido ha sido muy buena, incluso cuando yo ya estaba laboralmente activo seguían pendiente de mí para ver cómo me desenvolvía, cómo me sentía… Cuando se terminó mi contrato en la Diputación, mi orientadora Esther siguió implicada conmigo, mandándome cursos que podían interesarme, etc… y no solo a mí sino también a los demás que estábamos en Orienta. Formamos un grupito donde nos vamos apoyando y recomendando distintas opciones laborales, también para el tema de las oposiciones por ejemplo, en las que yo estoy muy interesado. Siempre nos comenta, nos informa y nos apoya.
Además, a la hora de mover papeles, echar distinta documentación, nos ha acompañado a donde tuviéramos que ir.
Yo trabajo aquí en ASPACE Granada de conserje, atendiendo llamadas, haciendo fotocopias….las necesidades que vayan surgiendo dentro de mis competencias. Por ahora es para cubrir una sustitución.
A raíz de este trabajo que estoy teniendo ahora pienso que a los negocios les falta información a la hora de saber qué beneficios puede obtener. No solo en beneficios fiscales sino en productividad para tu empresa, las personas con discapacidad te pueden ayudar tanto como personas que no la tengan, tenemos las mismas habilidades.
Yo creo que sí, es cierto que la situación ha mejorado pero hace falta mucho más, mucha más información…Siempre digo que los cursos están muy bien pero la mejor formación es el propio empleo. Se aprende trabajando, ofreciendo empleo. Yo quiero aprender a poder desarrollarme laboralmente. Cuando mis padres no estén quiero poder decir “tengo un trabajo fijo y me puedo valer por mí mismo, no solo lo que me dan por la discapacidad”. Quiero sentirme valorado por mi empresa y sentirme yo bien sabiendo que estoy ayudando.
¿Qué está mejorando? Sí ¿Qué está mejorando demasiado lento? También. El miedo de las empresas a contratar a personas con discapacidad sigue siendo muy alto. Hemos mejorado pero sigue habiendo mucho por hacer.