El Movimiento ASPACE, en el marco del Proyecto Rumbo, está trabajando para implantar un modelo de vida independiente en sus entidades, que fomente el empoderamiento y autogobierno de las personas con parálisis cerebral, incluidas las que tienen grandes necesidades de apoyo.

Según datos de ASPACE, el 80% de las personas con parálisis cerebral tienen grandes necesidades de apoyo, lo que significa que necesitan ayuda o acompañamiento de otra persona 24 horas al día, 365 días al año.

Para favorecer el desarrollo de una vida independiente para estas personas, el Proyecto Rumbo ha definido una serie de principios:

• Autodeterminación y empoderamiento: Son las personas con grandes necesidades de apoyo las que deben ser protagonistas de sus vidas y tomar sus propias decisiones. Para ello, es necesario que cuenten con los apoyos adecuados para desarrollar sus capacidades y habilidades.
• Entorno vital: El entorno familiar y comunitario es fundamental para el desarrollo de una vida independiente. Las familias deben apoyar a sus hijos e hijas con discapacidad desde la infancia, proporcionándoles oportunidades para que desarrollen su autonomía personal. Las administraciones públicas, las empresas y las instituciones también tienen la responsabilidad de promover entornos accesibles e inclusivos para las personas con discapacidad.
• Apoyo y acompañamiento de profesionales: Los profesionales pueden ser un facilitador para que las personas con grandes necesidades de apoyo tomen sus propias decisiones y participen en la sociedad. En particular, la figura de la asistencia personal debe ser una condición indispensable para el desarrollo de una vida independiente.

Estos principios están recogidos en una guía para impulsar la vida independiente de las personas con grandes necesidades de apoyo, que ha sido editada por Confederación ASPACE.

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