El pasado viernes, en una jornada histórica celebrada en el Senado de España bajo el título «Parlamento de las mujeres con discapacidad: ¡El futuro que queremos!» y organizada por la Fundación CERMI Mujeres, se han alzado voces fuertes en defensa de la inclusión y el respeto de los derechos de las mujeres con discapacidad.

300 mujeres con discapacidad participaron en dicho acto para plantear asuntos clave para una vida digna e igualdad de derechos y oportunidades. El evento contó con el apoyo del presidente del Senado, la secretaria de Estado de Igualdad, el presidente del CERMI Estatal y la presidenta de la Fundación CERMI Mujeres.

En las dos sesiones del «Parlamento», se quiso hacer hincapié en la evaluación de los últimos 10 años, la definición de retos futuros y la necesidad de mejorar las políticas públicas de igualdad. Se mencionó la discriminación interseccional, la violencia machista, la salud sexual y reproductiva, la accesibilidad y la participación social.

En presencia del ministro de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, Pablo Bustinduy, se ha delineado una agenda feminista para la discapacidad que abarcará la próxima década.

Además, Rocío Molpeceres, representante del Movimiento ASPACE en el consejo de participación de CERMI Mujeres, se convirtió en la voz principal de las mujeres con parálisis cerebral respaldada por la presidenta de Confederación ASPACE, Manuela Muro y por Fernanda Arrojo, presidenta de ASPACE Lugo.

En el corazón de sus demandas está la inclusión en la estrategia de desinstitucionalización del Gobierno, una petición fundamentada en la necesidad de una vida independiente y adaptada a sus necesidades individuales. Molpeceres enfatizó la importancia de la asistencia personal, destacando su papel crucial para la autonomía y participación plena en la sociedad. Por otro lado, Fernanda, expuso que debe existir adaptabilidad en las herramientas de diagnóstico dentro de los centros de salud y hospitales.

Otro punto crucial que se ha abordado es la necesidad de regular específicamente la Comunicación Aumentativa y Alternativa para garantizar la igualdad de condiciones en el ejercicio de los derechos. Molpeceres subrayó la importancia de facilitar la comunicación para todas las mujeres con discapacidad, especialmente en situaciones tan delicadas como las denuncias de violencia. Además, Fernanda reivindicó el derecho de las mujeres con discapacidad su derecho a ser madres si así lo deciden insistiendo en la importancia de eliminar la visión capacitista de cuidados.

Al acto acudieron otras muchas mujeres con discapacidad de diferentes movimientos y asociaciones, como fue el caso de CERMI Andalucía que tuvo una gran representación encabezada por Marta Castillo, su presidenta.

Las mujeres con parálisis cerebral y grandes necesidades de apoyo han reclamado su lugar en el movimiento feminista de la discapacidad, exigiendo una línea específica de acción que aborde sus realidades particulares y garantice una vida digna e inclusiva para todas. Su llamado es claro: no pueden ser dejadas atrás en la búsqueda de una sociedad más justa y equitativa para todos sus miembros.