Desde que los veía en la calle realizar actividades, organizar cualquier evento, siempre me llamaba la atención la alegría y esfuerzo que le ponen a cualquier cosa. Por esto empezó a llamarme la atención el conocerlos un poco más.
A algunos de los usuarios ya los conocía personalmente y cuando me los cruzaba en la calle, me contaban todas las actividades que realizaban en su centro, se les iluminaba la cara de ilusión en dar a conocer a los demás todo aquello que hacían, se sentían orgullosos de todo aquello que realizaban y por esto me invitaron a ver su centro y así fue como empecé esta aventura del voluntariado.
Tarde un tiempo en decidirme porque tampoco sabía si mi ayuda sería válida ó necesaria en el funcionamiento del centro pero un día que pasaba cerca me decidí a visitarlos y salir de dudas.
Tal fue mi asombro al ver la aceptación de mi ayuda así como el acogimiento por parte de usuarios y/o profesionales que desde el primer momento me sentí muy cómoda y valida, por eso por mi situación personal, disponía de bastante tiempo para dedicarlo a los demás que me pareció oportuno comprometerme con las personas con parálisis cerebral.
Con el tiempo te das cuenta, que no solo ellos aprenden o son los que necesitan ayuda, ya que yo personalmente he recibido mucho de estas personas. Dedicarles mi tiempo libre se ha convertido en recibir muestras de gratitud, cariño, sonrisas y alegrías, además del desarrollo y/o crecimiento personal que he experimentado con mi VOLUNTARIADO.
Es verdad que al principio cuesta integrarte con el grupo, principalmente porque cuando no has tenido antes contacto con personas con parálisis cerebral, te planteas algunas preguntas: ¿Cómo les hablo?, si no pueden hablar, ¿cómo me comunico con ellos?, ¿los trato como si fueran niños o como adultos? Pero todas estas dudas van desapareciendo gracias a las indicaciones de los profesionales, material que me facilitaron en el centro para saber cómo acercarme a las personas con parálisis cerebral e incluso cuando los vas conociendo a ellos.
Actualmente mi labor como voluntaria en el centro se basa principalmente en apoyar a las personas con parálisis cerebral para desarrollar sus tareas propias de los talleres que realizan. Además dada mi experiencia laboral realizo actividades con ellos para potenciar la lectoescritura, el manejo del dinero con aquellos que más lo necesitan. En ocasiones los acompaño en actividades de ocio que se realizan fuera del centro, en las cuales consigo acercarme mucho más a ellos y así conocerlos mejor, ya que se muestran emociones y/o sentimientos que no experimentan dentro del Centro.
Para terminar quisiera destacar que lo que empezó como una idea de ayudar a las personas que más podían necesitar la ayuda de otros, se ha convertido en una experiencia totalmente enriquecedora para mí, me ha hecho cambiar mi percepción sobre cuestiones básicas de la vida, como dar valor al hecho de levantarme cada día, el afrontar problemas de vida diaria, ya que ellos son capaces de hacerlo cada día sin que se les borre la sonrisa. Por todo esto animo a todas aquellas personas que dispongan de tiempo y ganas de dedicar este a los demás, que no duden en hacerlo, todos tenemos cosas que aportar.
Gracias a las personas con parálisis cerebral por también regalarme ellos su tiempo.
Ruth Rodríguez Chamorro
Voluntaria UPACESUR