Hola!, somos Manolo Martínez y Teresa Ramos, pero en Acpacys Córdoba nos conocen mejor por “los abuelos”. Conocemos Acpacys desde 2005 por nuestro nieto, y desde primera hora que entramos se nos inoculó el “virus acpacyano”. Desde entonces aprendimos una nueva realidad en la vida.
Comenzamos a participar en las actividades que se llevan a cabo en la Asociación de parálisis cerabral de Córdoba y a colaborar activamente en todo lo que va haciendo falta, de hecho venimos diariamente y siempre hay algo que hacer. Aquí cabe destacar que hasta yo, Manuel, soy vocal de la junta directiva de la Asociación.
Para nosotros esta experiencia en la Asociación es una revelación en cuanto a cómo enfrentar la vida y ver realmente los problemas que existen y relativizar lo que llamamos “problemas” que después no lo son tanto. A raíz de conocer Acpacys nos sentimos a un nivel diferente a como eramos antes, sobre todo en cuanto al trato con las personas que necesitan nuestro apoyo.
En definitiva, somos como una gran familia en la que caminamos ayudándonos unos a otros, nosotros para que ellos puedan tener una mejor calidad de vida, y ellos a nosotros en enseñarnos a ver la vida con sus propios ojos, porque en realidad, lo que nosotros les damos a ellos lo puede hacer cualquiera, pero lo que nosotros recibimos solo ellos nos lo pueden dar. Por eso y por más motivos que sería muy extenso enumerar, son muy importantes para mí.