Como en la vida, existen personas con distintas características y necesidades. Entre ellas, ASPACE representa al movimiento asociativo de las personas con parálisis cerebral y otras discapacidades afines, así como de sus familias.
Con la llegada de septiembre comenzamos un nuevo año escolar, por lo que nos es imposible no poner sobre la mesa un elemento fundamental en el desarrollo de la personas como es la educación. Una materia esencial que se ha visto transformada a lo largo de los últimos años, sobre todo, para los niños y niñas con discapacidad.
El sistema de enseñanza actual ha traído de nuevo el debate a raíz del desarrollo de la Ley Orgánica de Modificación de la LOE (LOMLOE) acerca de la integración de estudiantes con necesidades específicas de apoyo educativo junto con los que no la requieren.
Por ello, los Centros Especiales de Educación (CEE) se encuentran en primera línea dentro de esta discusión, planteándose cuestiones como: ¿Son necesarios la existencia de los mismos? ¿Están preparados las aulas ordinarias para acoger a todo tipo de alumno con capacidades distintas en el habla, la movilidad, etc.? ¿Se persigue verdaderamente la equidad entre los alumnos y alumnas olvidándonos de los apoyos específicos que cada uno necesita?
Para garantizar una atención educativa individualizada en cualquier modalidad se debe contar con una previsión de recursos suficientes ¿En qué enfocamos estos recursos?:
Resulta imprescindible tener en cuenta estas necesidades, así como acordar un presupuesto para respaldarlas ya que si se comenzara con el camino hacia la integración total de aulas sin la garantización de estos recursos podría propiciarse una importante vulneración de los derechos del alumnado con necesidades de apoyo.
Por todo ello, a lo largo de este mes nos enfocaremos en el tratamiento de la educación en sus distintos niveles desde la perspectiva de la discapacidad ¡Síguenos en redes para no perderte nada!